El proceso de creación de una página Web es emocionante, todos estamos deseando ver el resultado final y esperamos que se acerque lo máximo posible a la idea que teníamos en la cabeza. Cuando por fin tenemos lista nuestra página Web no nos cansamos de mirarla esperando que a los usuarios les guste tanto como a nosotros. Estamos seguros de que todo el que llegue a ella querrá volver y la recomendará a todo el mundo. Pero para que los usuarios quieran repetir en nuestra Web es necesario que lleguen hasta ella una primera vez. El objetivo final de toda página Web es conseguir visitas que se transformen en conversiones. Para aumentar las visitas a tu Web es necesario darle visibilidad, y para ello hay que tener en cuenta varios factores.
Optimización de la página Web
Para que nuestra página Web reciba visitas y, además, sean satisfactorias, es muy importante optimizar la página Web de modo que resulte atractiva tanto para los usuarios como para los buscadores. Para conseguirlo es necesario tener en cuenta todos los aspectos técnicos de la Web y también su diseño y contenido, en especial los que detallamos a continuación.
Haz que tu página sea adaptativa– no olvides que hoy en día los usuarios acceden a Internet desde distintos dispositivos. Nuestra Web debe resultar atractiva independientemente del dispositivo desde el que se visite. Es muy importante, por lo tanto, adaptar el diseño de la página para PCs, tablets y smartphones.
Vigila el tiempo de carga – una buena página Web debe ser ligera y tardar poco tiempo en cargarse. Nadie quiere esperar varios minutos para conseguir ver una página por completo. Normalmente los internautas esperan unos 6 o 7 segundos antes de desistir y buscar información en otra página Web.
Cuida el diseño – es cierto que todo entra por los ojos. Si una página Web cuenta con un diseño atractivo y claro es más probable que los usuarios se sientan más atraídos por ella que por otra página Web que, aún teniendo el mismo contenido, tenga un diseño que les guste menos.
Cuanto más les guste tu página a los usuarios más tiempo pasarán en ella y cuanto más tiempo pasen en ella los usuarios mayor valor le otorgará Google.
No olvides el blog – un blog en el que se escriba con frecuencia se ha vuelto imprescindible para cualquier página Web. No solo sirve para facilitar información a los visitantes, es la principal fuente de contenidos de una página que, además, se actualiza muy a menudo. Teniendo en cuenta que Google valora las actualizaciones frecuentes y la creación de contenido, no cabe ninguna duda de que una página sin blog está perdiendo mucho de su potencial.
Preséntate – si quieres que los usuarios tengan confianza en tu página Web es imprescindible que te presentes ante ellos debidamente. Una descripción detallada de quién eres y a qué te dedicas, de por qué decidiste crear tu Web y cómo se te ocurrió montar tu negocio acompañada de una fotografía harán que aumente la confianza de los visitantes de tu Web en ti y, por lo tanto, en tu proyecto.
Piensa como un periodista – todos los periodistas saben que un título atractivo puede encumbrar un artículo mediocre y viceversa. Por lo tanto, a la hora de crear el contenido de tu Web y los artículos de tu blog debes meterte en la piel de un periodista y encontrar el mejor título posible. El objetivo es llamar la atención y enganchar al lector. Después del título escribe con cuidado el primer párrafo, es donde el lector decidirá si merece la pena seguir leyendo.
No olvides las palabras clave – debes tener bien presentes las palabras clave por las que crees que tus posibles clientes buscarán tu negocio y utilizarlas, sin abusar, en los contenidos de tu página Web y de tu blog. Evita centrarte en palabras clave demasiado genéricas, cuanto más específico seas y más palagras «long tail» utilices más posibilidades tendrás de conseguir un buen posicionamiento. Una palabra clave «long tail» te asegurará tráfico de calidad hacia tu página Web.
Redes sociales
Las redes sociales son el vehículo perfecto para dar a conocer nuestra página Web y conseguir visitas. En ellas nos podemos relacionar con nuestros clientes potenciales y también podemos escuchar cuáles son sus inquietudes y qué es lo que más les interesa. Gracias a las redes sociales podemos compartir el contenido que generamos de forma sencilla y rápida, llegando a un público que está interesado en lo que le queremos contar.
Las redes sociales nos permiten compartir infografías, artículos o entrevistas. No importa el tipo de contenido creado, mientras sea de calidad resultará interesante a nuestros seguidores. Conviene no olvidar nunca los vídeos, una potente forma de generar contenidos que cuenta, además, con una de las redes sociales más utilizadas y a veces olvidadas: Youtube.
La publicidad en redes sociales puede resultar también de gran utilidad, es conveniente tenerla presente para promocionar determinadas publicaciones. Gracias a las posibilidades de segmentación podremos llegar al público que realmente estamos buscando. Las campañas de anuncios en Facebook y Twiter suelen tener excelentes resultados.
Networking
El networking tradicional se adapta al mundo online pero continúa teniendo la misma esencia: darse a conocer. Ya no es necesario acudir a miles de reuniones y eventos para dejarse ver entre las personas influyentes en nuestro sector. Hoy en día los foros son un lugar excelente para hablar, comentar y lanzar nuestras ideas. Si evitamos el spam y damos ideas y soluciones acertadas nuestra actividad en estos foros generará visitas hacia nuestra página Web.
Para que la gente se sienta interesada en nuestra página Web debe interesarse también por la persona que está detrás de ella. Cuidar la marca personal es muy importante y para ello hay que pensar con cuidado qué se dice y dónde. El modo de comunicarnos en las redes sociales y en los foros dice mucho de nosotros, también es conveniente escribir artículos invitados en blogs, conceder entrevistas o entrevistar a alguien relevante en nuestro blog para llegar al mayor número de personas.
Así que ya lo sabes, no pienses que con la creación de tu página Web finaliza el trabajo. Es ahora cuando empieza, y es un trabajo apasionante.